Internet ha tomado el control de nuestras vidas y tiene una gran capacidad de transformar la sociedad desde sus raíces, tanto en el ámbito de la participación familiar, profesional, humana y política. Dejando a un lado al Creador, obviando a Dios y la naturaleza humana y divina de Nuestro Señor Jesucristo (todo fue creado por él y para él. Colosences 1, 16
La red, nos esclaviza con contenidos cada vez más mundanos, atrayentes y excitantes, donde el humanismo digital corroe y desintegra nuestros sentidos, sentimientos y la propia Alma. Internet debe ser una herramienta que nos acerque más a las Personas, en la Caridad y el Servicio al Prójimo. Jn 13, 1, 35
Hemos trasladado el Pecado Original a la Red, creyendo que cuando apagamos el ordenador, la tablet o el móvil, todos los contenidos que hemos consumidos, quedan en esos dispositivos, pero la realidad es que dejan una huella digital que finalmente nos consume a nosotros mismos, sin tomar conciencia de que el Pecado existe, así pues Satanás aprovecha la tecnología para hacer desaparecer a Dios de nuestras vidas, aún siendo buenas Personas.
Aprovechemos todo el potencial que nos brinda el Espíritu Santo con sus Dones y Talentos, para que las nuevas tecnologías estén basadas en un consumo responsable y que cumplamos los Mandamientos y Preceptos de Dios. «“Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente”. Este mandamiento es el principal y primero. El segundo es semejante a él: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”. En estos dos mandamientos se sostienen toda la Ley y los Profetas». Mateo 22, 36-40
#LaHuellaDigitalDelPecadoOriginal